Artículo de opinión de María Luisa Soriano, viceportavoz del Grupo Parlamentario Popular
9 septiembre 2010.- En el PP tenemos muy clara nuestra misión de alternativa y aunque desde el PSOE digan que somos muy pesados, nosotros no tenemos la culpa de que día tras día, mes tras mes y año tras año tengamos que denunciar lo que día tras día, mes tras mes y año tras año viene haciendo mal el gobierno regional.
9 septiembre 2010.- En el PP tenemos muy clara nuestra misión de alternativa y aunque desde el PSOE digan que somos muy pesados, nosotros no tenemos la culpa de que día tras día, mes tras mes y año tras año tengamos que denunciar lo que día tras día, mes tras mes y año tras año viene haciendo mal el gobierno regional.
¿Qué más quisiéramos nosotros que no hubiera el paro que hay para no
tener que denunciar la incompetencia del gobierno de Barreda para
solucionarlo? ¿Qué más quisiéramos nosotros que en los 30 años de
gobierno socialista se hubieran dado soluciones eficaces al problema del
agua y no tener que seguir clamando al cielo para que llueva? ¿Qué más
quisiéramos nosotros que nuestros agricultores y ganaderos tuvieran el
status al que tienen derecho y del que año tras año les viene privando
el gobierno socialista? ¿Qué más quisiéramos nosotros que la Caja de
Castilla-La Mancha hubiera sido un ejemplo de buena gestión? ¿Qué más
quisiéramos nosotros que el aeropuerto de Ciudad Real fuese ya una
realidad? ¿Qué más quisiéramos nosotros que se hubiera solucionado el
grave problema de la energía? ¿Qué más quisiéramos nosotros que el vino
de Castilla-La Mancha tuviera un mercado y unos precios que acabaran con
la lamentable situación que tiene?
Estos y otros muchos ejemplos son el reflejo de la triste realidad a la que nos tienen condenados Barreda y su gobierno. Lo desolador es que, ante la letanía de tan gravísimas cuestiones, el gobierno regional con su presidente a la cabeza, en el debate sobre el estado de la región, han respondido, como es costumbre, tratando de adormecer a la población con cuentos chinos y con promesas que nunca llegan y que, mientras ellos estén en el gobierno, nunca podrán llegar, por la sencilla razón de que su más que demostrada incompetencia no les permite encontrar las soluciones.
Las personas que hayan seguido el último debate se habrán dado cuenta que todo parece responder a un guión premeditado del gobierno socialista para dar la espalda a la dura realidad de la región, y se habrán percatado de que en el PP tenemos muy clara nuestra misión y que no nos faltan ganas ni para hacer propuestas eficaces ni para denunciar con insistencia todo lo que no funciona. Que tengan la seguridad de que nosotros seguiremos en la brecha hasta que gobernemos en Castilla-La Mancha. Mientras tanto tendremos que seguir soportando todo tipo de añagazas, zancadillas, presiones, calumnias, mentiras y demás tácticas en las que los responsables del gobierno regional y sus acólitos son maestros consumados.
Sabemos, porque lo soportamos, lo difícil que resulta el cambio por el férreo control de medios que ejercen, pero los castellano manchegos se han dado cuenta de que ha llegado la hora de que nuestra región sea gobernada por mejores manos. Desde el PP queremos transmitir a los ciudadanos que seguiremos cumpliendo con nuestro deber y que gobernaremos Castilla-La Mancha sin demagogias, sin artimañas, sin engaños, sin propaganda, sin camelos, sin triquiñuelas y sin la inadmisible creación de falsas expectativas con las que nos han venido gobernando.
Estos y otros muchos ejemplos son el reflejo de la triste realidad a la que nos tienen condenados Barreda y su gobierno. Lo desolador es que, ante la letanía de tan gravísimas cuestiones, el gobierno regional con su presidente a la cabeza, en el debate sobre el estado de la región, han respondido, como es costumbre, tratando de adormecer a la población con cuentos chinos y con promesas que nunca llegan y que, mientras ellos estén en el gobierno, nunca podrán llegar, por la sencilla razón de que su más que demostrada incompetencia no les permite encontrar las soluciones.
Las personas que hayan seguido el último debate se habrán dado cuenta que todo parece responder a un guión premeditado del gobierno socialista para dar la espalda a la dura realidad de la región, y se habrán percatado de que en el PP tenemos muy clara nuestra misión y que no nos faltan ganas ni para hacer propuestas eficaces ni para denunciar con insistencia todo lo que no funciona. Que tengan la seguridad de que nosotros seguiremos en la brecha hasta que gobernemos en Castilla-La Mancha. Mientras tanto tendremos que seguir soportando todo tipo de añagazas, zancadillas, presiones, calumnias, mentiras y demás tácticas en las que los responsables del gobierno regional y sus acólitos son maestros consumados.
Sabemos, porque lo soportamos, lo difícil que resulta el cambio por el férreo control de medios que ejercen, pero los castellano manchegos se han dado cuenta de que ha llegado la hora de que nuestra región sea gobernada por mejores manos. Desde el PP queremos transmitir a los ciudadanos que seguiremos cumpliendo con nuestro deber y que gobernaremos Castilla-La Mancha sin demagogias, sin artimañas, sin engaños, sin propaganda, sin camelos, sin triquiñuelas y sin la inadmisible creación de falsas expectativas con las que nos han venido gobernando.