Artículo de opinión de María Luisa Soriano, viceportavoz del Grupo Parlamentario Popular
3 junio 2010.- En George Orwell, en su obra ‘Rebelión en la granja’, cuenta cómo los animales expulsaron a los humanos y crearon su propio sistema de gobierno. Al principio la granja era próspera, pero por los abusos de poder y manipulación, la granja terminó yéndose al garete.
3 junio 2010.- En George Orwell, en su obra ‘Rebelión en la granja’, cuenta cómo los animales expulsaron a los humanos y crearon su propio sistema de gobierno. Al principio la granja era próspera, pero por los abusos de poder y manipulación, la granja terminó yéndose al garete.
Orwell hizo un análisis de la corrupción a la que llega el poder cuando
no se desarrolla correctamente. Para ello describe cómo van cambiando
las reglas en las que los animales basaron su sistema de gobierno. De
"Ningún animal dormirá en una cama" pasaron a "Ningún animal dormirá en
una cama con sábanas", de "Ningún animal beberá alcohol" pasaron a
"Ningún animal beberá alcohol en exceso", y de “Todos los animales son
iguales” pasaron a "Todos los animales son iguales, pero algunos son más
iguales que otros".
Nadie puede negar que el aeropuerto de Ciudad Real puede ser la infraestructura adecuada para traer a nuestra provincia el trabajo y desarrollo que tanto necesitamos, pero, hasta ahora, como se dice en la calle, no ha conseguido despegar, lo que, sin duda, es una auténtica lástima.
Sus propietarios se embarcaron en una aventura de calado en la que, por ahora, no se atisba el final feliz que habían previsto y, como medida desesperada, se han planteado aumentar sus inversiones.
Para que los bancos les presten el dinero, su solicitud tiene que ir avalada, lo cual no es de extrañar ya que el aeropuerto ha supuesto para CCM una hemorragia que deja pequeña a la de José Tomás en la plaza de Aguascalientes, con la diferencia de que al diestro de Galapagar le operó un cirujano que supo arreglar las arterias que le rompió el toro y, en cambio, en CCM operaba un socialista que, jugando a magnate, en vez de cortar la hemorragia, ha ocasionado que en Castilla-La Mancha nos hayamos quedado sin nuestra Caja.
Agazapado detrás del PSOE, Barreda pretendía, con su manoseado rodillo parlamentario, utilizar sibilinamente a las Cortes regionales para que todos los castellano manchegos concediésemos a la sociedad CR Aeropuertos un aval de, nada más y nada menos, 140 millones de euros (unos 25.000 millones de pesetas).
No es la primera vez que la referida sociedad obtiene un trato de favor del jefe del ejecutivo regional, pasando desde la expropiación forzosa de los terrenos de los agricultores de la zona a la modificación de la Ley del Suelo.
A pesar de que, a última hora, Barreda aplazó su propuesta, mosquea el extraordinario interés que ha puesto en avalar precisamente a unos pocos empresarios, cuando en Castilla-La Mancha, sólo en el año 2009, desaparecieron 28.834 autónomos y, en estos momentos, de forma alarmante, cada día, se produce la friolera liquidación de 80 empresas.
Está claro que, en la granja de Barreda “Todos los animales son iguales, pero algunos son más iguales que otros", y ya se sabe que la próspera granja de Orwell, cuando la gobernaron con abusos de poder y manipulación, terminó convertida en una tiranía brutal.
Nadie puede negar que el aeropuerto de Ciudad Real puede ser la infraestructura adecuada para traer a nuestra provincia el trabajo y desarrollo que tanto necesitamos, pero, hasta ahora, como se dice en la calle, no ha conseguido despegar, lo que, sin duda, es una auténtica lástima.
Sus propietarios se embarcaron en una aventura de calado en la que, por ahora, no se atisba el final feliz que habían previsto y, como medida desesperada, se han planteado aumentar sus inversiones.
Para que los bancos les presten el dinero, su solicitud tiene que ir avalada, lo cual no es de extrañar ya que el aeropuerto ha supuesto para CCM una hemorragia que deja pequeña a la de José Tomás en la plaza de Aguascalientes, con la diferencia de que al diestro de Galapagar le operó un cirujano que supo arreglar las arterias que le rompió el toro y, en cambio, en CCM operaba un socialista que, jugando a magnate, en vez de cortar la hemorragia, ha ocasionado que en Castilla-La Mancha nos hayamos quedado sin nuestra Caja.
Agazapado detrás del PSOE, Barreda pretendía, con su manoseado rodillo parlamentario, utilizar sibilinamente a las Cortes regionales para que todos los castellano manchegos concediésemos a la sociedad CR Aeropuertos un aval de, nada más y nada menos, 140 millones de euros (unos 25.000 millones de pesetas).
No es la primera vez que la referida sociedad obtiene un trato de favor del jefe del ejecutivo regional, pasando desde la expropiación forzosa de los terrenos de los agricultores de la zona a la modificación de la Ley del Suelo.
A pesar de que, a última hora, Barreda aplazó su propuesta, mosquea el extraordinario interés que ha puesto en avalar precisamente a unos pocos empresarios, cuando en Castilla-La Mancha, sólo en el año 2009, desaparecieron 28.834 autónomos y, en estos momentos, de forma alarmante, cada día, se produce la friolera liquidación de 80 empresas.
Está claro que, en la granja de Barreda “Todos los animales son iguales, pero algunos son más iguales que otros", y ya se sabe que la próspera granja de Orwell, cuando la gobernaron con abusos de poder y manipulación, terminó convertida en una tiranía brutal.
