Llevan poco más de seis meses gobernando y Castilla-La Mancha ya está reproduciendo las actitudes que nos llevaron a la peor crisis que se recuerda en nuestra región. El gastar sin control en cosas accesorias está haciendo que, a día de hoy, ya se esté dejando de pagar los programas y subvenciones a determinadas asociaciones y colectivos. Sin salir de la provincia de Ciudad Real hay asociaciones del ámbito social, de momento calladas, que no han cobrado nada en lo que llevamos de año, y la excusa que les ponen es que los presupuestos para 2016 no están aprobados por culpa del PP. El problema para el PSOE es que esto ya no se lo cree nadie.

Es muy socorrido echar la culpa a los demás, pero ya no cuela. Todos sabemos que son excusas de mal pagador, porque el hecho de que haya o no presupuesto no es óbice para pagar o no pagar. Para pagar lo que hace falta es tener dinero en las cuentas, no tener números en el presupuesto, y tienes dinero en las cuentas si no te los gastas en propaganda, autobombo, y en asesores y liberados, como está haciendo el gobierno de Page. O en planes de empleo pagados por otros. No sé las fotos que se habrán hecho ya Page y su consejera de Economía y Empleo a cuenta del Plan de Empleo. Un Plan de Empleo que causa zozobra en los ayuntamientos, porque se trata de un caramelo envenenado. Un instrumento para crear empleo precario, ese que tanto critican los progres, y cuyo pago recaerá sobre las costillas de los ayuntamientos. Porque a estas alturas de la película nadie duda de que serán los ayuntamientos los que soporten el coste total del plan y que la Junta pagará tarde, mal y nunca, como siempre ha hecho en estos casos cuando ha gobernado el PSOE. De momento la Junta ya tiene en sus cuentas el dinero que las Diputaciones aportan al Plan y entendemos que, con el principio de caja única, ya se lo estarán gastando en sus obligaciones de pago. Luego, cuando llegue el momento de pagar a los ayuntamientos, si te he visto no me acuerdo. Pero no se preocupen, la culpa será del PP. Las entidades financieras que se han hecho la foto con la Junta, ya han enviado circulares a sus directores advirtiéndoles de que, una cosa es la foto con Page, y otra muy distinta es el riesgo que asumen. Que no van a adelantar el dinero de los planes nada más que a los ayuntamientos cuya capacidad de endeudamiento así lo permita. Si la Junta no paga al ayuntamiento en cuestión en tiempo y forma, paga la entidad financiera, pero los intereses corren de cuenta de los ayuntamientos, claro.

Algo así está pasando también con los agricultores y ganaderos. Sector estratégico y fundamental en Castilla-La Mancha que están viendo como Page aún les debe 150 millones de euros de la PAC, concretamente a más de 15.000 agricultores y ganaderos de la región que hicieron su solicitud en el primer trimestre de 2015. Ciudad Real es la segunda provincia a la que más dinero debe el Gobierno de Page, más de 39 millones de euros. Esta deuda está provocando importantes problemas de liquidez a las explotaciones agrarias que contaban con estos ingresos para afrontar sus gastos de gestión y va a provocar un importante perjuicio al sector agrario desde el punto de vista fiscal, ya que se acumulará el cobro de las ayudas directas de los ejercicios 2015 y 2016 en un solo año y, por lo tanto, deberán pagar más a Hacienda al aumentar su base imponible de este año. Nuestra compañera Lola Merino está denunciando este hecho sin precedentes y ha indicado que “nunca antes se había hecho tanto daño al sector agrario en tan poco tiempo”. En definitiva, nuevos tiempos pero viejas políticas que llevarán de nuevo a nuestra región a la crisis y a la quiebra. Escrito queda.